DOS MÉTODOS DE ENSEÑANZA PROVENIENTES DEL CALCIO ITALIANO.

Con estos dos métodos, los italianos están convencidos que estarán formado completamente a los jugadores del mañana. Ellos han encontrado que hay movimientos específicos que tendrán que enseñarse con métodos específicos. Por ejemplo para la recuperación del balón y el regate el método “El juego es el maestro” podrá ser el ideal, mientras que el método ACC podrá traer importantes beneficios con respecto a la efectividad del pase y el disparo a gol.

Método GMSS /Gioco maestro di se stesso. El juego es el maestro.
A diferencia de lo que sucede con el método A-A-C, con el método GMSS, los niños se enfrentan a situaciones durante las cuales el profesor no debe intervenir para corregir los aspectos técnicos, pero si dejar que los alumnos intenten encontrar soluciones favorables a la situación, experimentando éxitos y fracasos.

Durante las actividades motoras y en el caso del futbol se deja que encuentren las soluciones por sí mismos. El entrenador propone algunas actividades que son útiles para los niños, jugarán juegos en los que hay situaciones problemáticas de resolver y que, gracias a ellos, el niño pueda progresar.
La tarea de los niños es tomar un papel activo durante el juego.

Se trata de un tipo de aprendizaje donde el  maestro - entrenador tiene el rol de mediador y solo debe alentar a los niños tratando de mantener un clima positivo de trabajo y juego.
El profesor interviene solo para hacer cumplir las reglas del juego.

El profesor nunca interviene de manera formal al detener la acción del juego por Mostrar cómo realizar un determinado movimiento.

Por lo tanto, los niños siempre se enfrentan a situaciones reales de juego y no realizan actividades que se salgan de ese objetivo. Juegan juegos que permitirán que los niños mejoren sin que el profesor les dé consejos técnicos.

Método A.A.C.- ADQUIRIR Y ESTABILIZAR – APLICAR Y VARIAR – CREAR Y COMPLETAR

A: adquirir y estabilizar
En esta primera fase se le permite al niño descubrir y probar; es por tanto una primera fase de experimentación pero supervisada por el maestro que le permite al niño desarrollar la conciencia del patrón motor y comienza a grabar de forma muy global el proceso que conduce al movimiento.

El profesor en esta primera fase debe intentar estimular la participación del niño creando situaciones de fácil aprendizaje. El profesor no tiene que expresar opiniones o dando consejos. Debe permitir al estudiante experimentar.

A.- Aplicar y variar.
En esta segunda fase el profesor debe ofrecer al niño ejercicios para mejorar. El niño tendrá aún más contacto con todos los procedimientos que conducen a la correcta ejecución del movimiento. Una vez que el movimiento básico comienza a desarrollarse, se debe proceder a combinar el movimiento que acabamos de aprender con otros, a fin de ayudar al niño a mejorar.
A diferencia de lo que sucedió anteriormente, el papel del profesor es mucho más importante y formal.

En este método el entrenador incita al niño a trabajar y debe comenzar a corregir los movimientos del niño.

En este caso el profesor desfragmenta el movimiento para ayudar al niño y crea situaciones en las que el niño puede aplicar lo que acaba de aprender.

C.-  Crear y completar
En esta última etapa el niño ya tiene más que bases sólidas de los movimientos y podrá combinarlos con otros y variar.

 El propósito por lo tanto es busca y perfeccionar aún más el movimiento. El profesor debe crear situaciones en el que el niño deba ser capaz de desenganchar en situaciones inusuales.
Otra tarea que pertenece al entrenador es aconsejar, incitar y ayudar al niño en este trabajo. Permitir que el niño desarrolle todo al máximo, debe proponer situaciones en las que el el niño pueda probarse a sí mismo.

En este método, el papel del profesor es, por lo tanto, de importancia fundamental, que debe ser un excelente observador para comprender cuándo el niño está listo para llevar a cabo la siguiente fase. Debe saber conversar muy bien con su alumno para ayudarlo a mejorar, animándolo y corrigiéndolo a tiempo.

El profesor también debe muy bien estructurar el trabajo. Además de esto, el maestro siempre debe estar presente y activo, de hecho, tendrá que ayudar al niño en la mejora de la técnica.

El profesor tiene a su disposición varias herramientas para corregir los problemas y errores que el niño comete tales como: 1) retroalimentación, 2) evaluaciones formativas o 3) autoevaluaciones.
En este método, el papel del profesor es fundamental, de hecho las correcciones y la ayuda que da a los niños, permitirá a estos últimos progresar.

Si desea conocer más acerca de la aplicación de estos métodos en una investigación académica, puede consultar la tesis de Federico Buser (2013) que comparto aquí: