Once cosas
que el entrenador debe saber acerca de la posesión del balón
Por Armando Anaya,
Futbolscopía Entrenadores
- No basta con pedir que tu equipo juegue como el Barza
- Las cosas que se entrenan son más probables que salgan el día del partido
1) Lo que determina el tipo de posesión de balón es la
interrupción. Por tanto tenemos dos clases de posesiones: a) con balón en
juego, aplica cuando un jugador se apodera del balón recuperándolo al equipo
adversario, sin que para ello haya mediado ninguna interrupción reglamentaria y
b) con balón parado, aplica cuando se haga efectiva la puesta en juego del
balón después de que se haya decretado una interrupción reglamentaria y en
consecuencia se hubiese detenido el juego. Las interrupciones reglamentarias en
las que el equipo puede poner el balón en juego son: saque de puerta, saque de
banda, saque de esquina, falta, bote neutral, penalti, fuera de juego y saque
de centro.
2) Existen variadas circunstancias durante el juego que no
se deben considerar como aspectos de la posesión del balón, éstas son las
anticipaciones, los desvíos de tiros a gol, los rechazos o despejes etc. Se
debe considerar como posesión de balón la secuenciación de dos o más pases
entre los compañeros, sin la anticipación de la progresión por parte del rival.
3) Un elemento importante a
trabajar durante los entrenamientos es la concatenación o consecución de los pases. Es decir, el segundo, tercer o cuarto
pase. Mal elegidos, mal dirigidos o mal recibidos puede convertirse en un
inconveniente táctico para nuestro equipo. Por lo tanto "La posesión del
balón debe ser inteligente y pensando en terminar todas las jugadas"
4). "Toda progresión
ofensiva debe tener variables".
Ello implica evitar la monotonía. Es decir pasar y llevar el ataque siempre a
la misma velocidad, siempre en los mismos sectores del espacio, siempre
moviéndose sin balón del mismo modo. Ese modo de posesión del balón es
fácilmente leído y neutralizado por el adversario.
5) Cuando la penetración por los
espacios más ocupados se empieza a dar de manera constante en nuestros equipos,
debemos corregir el abuso de pases laterales o demasiado frontales. Centralizar el juego es una práctica
común en todos los niveles de juego que favorecen el plan destructivo del rival.
El pase entre líneas es un recurso que bien aplicado, descansa anímicamente al
rival y deja en posición inmejorable al receptor. "Busque y si no
encuentra limpie zonas de acceso".
6) Para trabajar un partido no
basta con pensar solamente en el marco contrario. Muchos buenos equipos primero
desgastan físicamente al rival tocándoles una y otra vez el balón, arruinando
su plan de juego y después lo aniquilan cuando comienzan a generar espacios más
por cansancio que por falta de voluntad. “Si el adversario presiona cansarlo mediante posesiones largas”.
7) La posesión del balón no sólo es
una forma de entender la ofensiva; es una fase
del juego (el despliegue) que debe ser entendida y concebida como tal. Sirve
también para encontrar las mejores condiciones para atacar y para evitar que el
adversario nos convierta goles. “Defienda teniendo el balón”. Hasta el portero
necesita ser considerado como un elemento significativo en la posesión.
8) No todos los despliegues se
deben basar en traslados de la línea defensiva al medio campo y de la media
cancha a la zona de ataque. Algunas veces conviene saltar líneas para evitar la presión del rival, para partirlo o
para imponer una forma de juego que nos permita aligerar la presión.
9) Acostumbrar desde edades
tempranas a que los jugadores tengan posesión del balón el fútbol de conjunto resulta
relativamente fácil y divertido. La posesión del balón no nada más da el
control al equipo, también dota de seguridad
técnica, táctica, psicológica y desgasta menos. “Que el balón no deje de
moverse, él nunca se cansa”.
10) Con un tiempo de ejecución
mayor a 30 segundos se consiguen solamente el 9% de los goles. Eso significa
que entre más largas son las posesiones sin terminación de jugadas se reducen
las posibilidades de que se anote gol. “Posesión del balón con profundidad”. La
línea es muy delgada cuando se habla de posesión del balón con ataque profundo
y posesión del balón con inclinación al juego corto. Muchos
equipos tocan y tocan pero no logran capitalizar ese enorme poder con el
resultado en la cancha.
11) Los mejores equipos entrenan
momentos de juego que incluyen una interminable gama de posibilidades ofensivas
que no nada más se basan en llegar tocando. Conducir desequilibra, sorprende y
rompe con el juego monótono. Conducir junta rivales que deja desmarcados
compañeros. “La conducción debe
complementar a la posesión”.