Nuevas tendencias: El formador del futuro.

En las próximas décadas corremos el riesgo de que nuestro trabajo como formadores de un giro de 360 grados. Hay un grupo de dirigentes del fútbol que no ven con malos ojos que la posibilidad de jugar con 15 o 20 extranjeros se haga una realidad.


Entonces ¿Qué pasará con nuestros futbolistas formados?

Se van a requerir nuevos espacios para ellos en modalidades transversales del fútbol, la competencia seguirá siendo férrea, se fortalecerá un mercado negro de piernas que juegan cada fin de semana por una cantidad de dinero, cada vez se irán al extranjero más y más jóvenes con sus propios medios, el fútbol colegial seguirá creciendo y desde luego, lo más importante: se estará demandando de un formador capacitado de un modo diferente.Aquí entrarán en perfil creativo y el perfil innovador.

El perfil creativo es aquel que produce ideas nuevas frecuentemente. Es más, la gente más creativa está permanentemente pensando en ideas nuevas y sus ideas pueden ser muy buenas. Sin embargo les falta algo, un componente imprescindible para el éxito: su capacidad de implementación.

El creativo piensa, crea, produce ideas pero éstas no están atadas a resultados (...) justamente porque en su desarrollo cerebral el lado derecho del cerebro es el que actúa permanentemente, sin dar paso al lado izquierdo, responsable del pensamiento lógico y la consecución de resultados.

Sin embargo, el perfil innovador es aquel que trabaja simultáneamente con ambos hemisferios del cerebro. Este es un perfil escaso, y de allí que las empresas hagan tantos esfuerzos por conseguir este tipo de perfil.

El innovador es aquel quien, utilizando el lado derecho del cerebro es capaz de crear una nueva solución o un nuevo producto, e inmediatamente pone su lado izquierdo del cerebro en funcionamiento para que esa idea se implemente de forma que produzca resultados.

Los enfoques heurísiticos irán ganando terreno sobre los pensamientos positivistas pero vendrán acompañados de altas dosis de implementación.